¿Me ama Jesús?
Sí, la Biblia establece claramente que Jesús nos ama. No importa lo que hayamos hecho, Él nos da vida eterna gratuitamente si creemos en Él. "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna" (Juan 3:16). Dios mostró Su amor por nosotros incluso antes de que naciéramos al enviar a Jesucristo, Su propio Hijo, para que fuera la propiciación por nuestros pecados: "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros" (Romanos 5:8). Dios no nos hace pagar por la salvación. Es un don gratuito que está a nuestro alcance por Su gracia. "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe" (Efesios 2:8-9).
En este mundo caído, estamos acostumbrados a que la gente nos decepcione. Nos cuesta mucho imaginar que el amor de Jesús nunca pueda fallarnos. La gente nos defrauda, pero Jesús nunca lo hará. Jesús es Dios hecho hombre (Juan 1:14). Él nos creó, nos sostiene y nos ofrece la vida eterna. Su amor fiel siempre está ahí para nosotros: "¡El fiel amor del Señor nunca se acaba! Sus misericordias jamás terminan. Grande es su fidelidad; sus misericordias son nuevas cada mañana" (Lamentaciones 3:22-23 - NTV).
Una de las razones por las que nos puede resultar difícil creer que Jesús nos ama es porque estamos conscientes de nuestros propios fracasos. Todos conocemos los errores que hemos cometido y nos cuesta creer que Jesús pueda amarnos. La buena noticia es que Jesús ya conoce tu pasado y tu futuro, y Su amor y perdón están disponibles para ti. Incluso cuando Jesús estaba muriendo en la cruz, mostró amor y salvó a un criminal que estaba siendo crucificado en la cruz junto a Él. El criminal lo reconoció como el Cristo: "Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso". (Lucas 23:42-43). El criminal en la cruz se estaba muriendo cuando expresó su fe en Jesús, y Él aceptó su acto de fe y le prometió la eternidad con Él en el cielo.
Jesús te ama tanto que dio Su vida para que pudieras nacer de nuevo y recibir Su vida eterna. Si quieres aceptar a Jesús como tu Salvador ahora mismo, puedes orar y aceptarlo como tu Señor y Salvador. La Biblia dice: "si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo" (Romanos 10:9).
No tienes que orarla exactamente así, pero a continuación te presentamos una oración de salvación que puedes usar si deseas seguir a Jesús y recibir Su vida eterna:
"Amado Dios, confieso que soy un pecador. Sé que ninguna obra buena que pueda hacer logrará llevarme al cielo. Hoy, decido poner mi fe en Jesucristo. Creo que Él es el Hijo de Dios que fue crucificado y que resucitó de entre los muertos para que yo pudiera ser salvo y tener vida eterna. Ahora te pido que perdones mis pecados. Quiero vivir para ti a partir de hoy. Gracias por aceptarme como hijo tuyo y por darme el don de la vida eterna".
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