¿Qué son los salmos penitenciales?

La palabra penitencial significa "que expresa arrepentimiento o remordimiento". Los salmos penitenciales son siete salmos específicos que expresan arrepentimiento. Estos salmos pertenecen a una categoría más amplia llamada salmos de lamentación. Hay otros salmos, como los salmos de alabanza, los salmos de sabiduría, los salmos de acción de gracias y los salmos de la realeza. Agustín de Hipona (354-430 d.C.) identificó cuatro salmos como salmos penitenciales, pero hoy en día utilizamos la lista de siete "salmos de confesión" de Casiodoro en su obra Exposición de los Salmos, del año 500 d.C., cuando nos referimos a los salmos penitenciales. Esos salmos son los salmos 6, 32, 38, 51, 102, 130 y 143. Tradicionalmente, estos salmos se utilizan para la reflexión y el arrepentimiento durante el tiempo de Cuaresma, y el Salmo 130 suele leerse en los funerales.

Todos los salmos penitenciales acostumbran a seguir una estructura similar. Comienzan con una petición general de ayuda, sanidad o misericordia. Luego, el salmista expone la realidad de la condición en la que se encuentra. Por último, el salmo concluye con una petición de ayuda concreta. Este patrón se hace evidente cuando comparamos el Salmo Penitencial más conocido, el Salmo 51, con los Salmos 38 y 143.

Todos estos salmos comienzan con un clamor de ayuda. El Salmo 38:1 dice: "Señor, no me reprendas en tu furor, ni me castigues en tu ira". El Salmo 51 comienza así: "Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones". Y el Salmo 143 comienza así: "Oh Señor, oye mi oración, escucha mis ruegos; respóndeme por tu verdad, por tu justicia".

Luego, cada salmo continúa exponiendo la condición actual del salmista, y con frecuencia reconoce su estado pecaminoso, así como las terribles consecuencias de ese pecado. El Salmo 38:4-5 dice: "Porque mis iniquidades se han agravado sobre mi cabeza; como carga pesada se han agravado sobre mí. Hieden y supuran mis llagas, a causa de mi locura". El Salmo 51:3 dice: "Porque yo reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre delante de mí". El Salmo 143:2-3 dice: "Y no entres en juicio con tu siervo; porque no se justificará delante de ti ningún ser humano. Porque ha perseguido el enemigo mi alma; ha postrado en tierra mi vida; me ha hecho habitar en tinieblas como los ya muertos". En cada salmo, el autor presenta un problema distinto -heridas, mala conciencia, persecución del enemigo-, aunque el escritor lleva su condición actual ante el Señor, reconociendo humildemente su propia injusticia en relación con sus circunstancias.

Por último, todos terminan con una súplica a Dios en busca de ayuda específica. El Salmo 38 concluye así: "No me desampares, oh Señor; Dios mío, no te alejes de mí. Apresúrate a ayudarme, oh Señor, mi salvación". (Salmo 38:21-22). El Salmo 51 concluye con una súplica a Dios: "Haz bien con tu benevolencia a Sion; edifica los muros de Jerusalén. Entonces te agradarán los sacrificios de justicia, el holocausto u ofrenda del todo quemada; entonces ofrecerán becerros sobre tu altar" (Salmo 51:18-19). Y el Salmo 143 termina así: "Por tu nombre, oh Señor, me vivificarás; por tu justicia sacarás mi alma de angustia. Y por tu misericordia disiparás a mis enemigos, y destruirás a todos los adversarios de mi alma, porque yo soy tu siervo" (Salmo 143:11-12). Aunque cada salmo termina con una súplica diferente, todas son peticiones de ayuda específica a Dios.

Es importante señalar que la razón por la que los salmistas (David en estos tres casos) se acercan a Dios confiadamente en su arrepentimiento es por el carácter de Dios y no por su aparente mérito. El Salmo 51 implora la misericordia y el perdón de Dios "conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades" (Salmo 51:1). El Salmo 143 hace referencia a la "fidelidad" (143:1), la "justicia" (143:1, 11) y la "misericordia" (143:12) de Dios. Así pues, estos autores apelan al carácter de Dios para pedir perdón y misericordia, y no a sus propios esfuerzos de bondad.

El arrepentimiento es un acto de fe, como se evidencia en el Salmo 38, cuando el salmista exclama: "Porque en ti, oh Señor, he esperado; tú responderás, Señor Dios mío" (Salmo 38:15). Porque Dios es "¡Señor! ¡Señor! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad" (Éxodo 34:6), podemos confiar en que "si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad" (1 Juan 1:9). El Salmo penitencial 32 dice sencillamente: "Dije: Confesaré mis transgresiones al Señor; y tú perdonaste la maldad de mi pecado" (Salmo 32:5b).

Algunos han sugerido una secuencia en los siete salmos penitenciales. Según ellos, el Salmo 6 expresa el temor al castigo; el Salmo 32, el dolor por el pecado; el Salmo 38, el paso a la esperanza, la aparición del temor y el retorno a la confianza; el Salmo 51, el amor a la pureza; el Salmo 102, la nostalgia del cielo; el Salmo 130, la desconfianza en las propias fuerzas; y, por último, el Salmo 143, que cierra esta progresión de remordimientos con el gozo.

Ya sea que se estudien juntos o por separado, cada uno de estos salmos penitenciales ofrece un ejemplo de cómo presentarse ante Dios en arrepentimiento. Alientan al lector a clamar a Dios en busca de ayuda, a reconocer el propio estado pecaminoso y a confiar en el carácter de Dios para recibir Su perdón. Por supuesto, el carácter amoroso de Dios se revela más claramente al enviar a Su Hijo, Jesús, para que se sacrificara por nosotros. "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios" (Juan 3:16-18).



Verdad relacionados:

¿Qué son los salmos de lamentación?

¿Qué son los salmos imprecatorios?

¿Qué son los salmos de alabanza?

¿Qué es un maskil en el Libro de los Salmos?

¿Qué principios se usan en la exégesis bíblica?


Volver a:
La verdad sobre La Biblia










Buscar:



Navegación

Acerca

Fe