¿Qué dice la Biblia?
Ramá, que significa “lugar alto y elevado” o “la altura” en hebreo, tiene importancia en la Biblia como fortaleza militar o atalaya, con cuatro ciudades que llevan su nombre. En particular, la Ramá de Benjamín, situada cerca de Jerusalén, fue heredada por las tribus de Benjamín y Simeón. Esta ciudad desempeñó un papel fundamental en las narraciones bíblicas, ya que sirvió de hogar a jueces israelitas como Débora y Samuel, así como de refugio para David que huía de Saúl. Además, Ramá fue testigo de conflictos militares, como las batallas entre reinos vecinos y el cautiverio babilónico de Judá. A pesar de su tumultuosa historia, Ramá siguió siendo un símbolo de la promesa de Dios a Su pueblo elegido, y acabó siendo reasentada tras el exilio. El Nuevo Testamento también hace referencia a Ramá en relación con trágicos acontecimientos, subrayando su perdurable importancia en la historia y la profecía bíblicas.