¿Qué dice la Biblia sobre la lactancia materna?

En resumen:

La Biblia hace referencia a la lactancia materna varias veces, centrándose en el alimento y el cuidado que una madre lactante da a su hijo. Dios te cuida y te alimenta con todo lo que necesitas.

¿QUÉ DICE LA BIBLIA?

Durante los tiempos bíblicos, la lactancia materna era esencialmente la única forma de alimentar a un bebé y, por lo tanto, era una práctica esperada y normal. Sin embargo, es importante señalar que la lactancia materna nunca es un mandamiento, ni tampoco se consideran pecado los métodos alternativos para satisfacer las necesidades nutricionales de un bebé. La Biblia se refiere a la lactancia como una parte natural y esencial de la crianza. También la relaciona con la alimentación espiritual. En Isaías 49:15, Dios compara el cuidado de Su pueblo con el de una madre que no puede olvidar a su hijo lactante, subrayando la importancia del amor y el sustento maternos. Además, 1 Tesalonicenses 2:7 ilustra las cualidades protectoras de una madre, reforzando el valor de la crianza, que incluye la lactancia como un aspecto vital de ese cuidado.

DEL ANTIGUO TESTAMENTO

DEL NUEVO TESTAMENTO

IMPLICACIONES PARA HOY

En la Biblia, la lactancia materna se considera la forma natural y esperada de alimentar a un bebé. Sin embargo, la Biblia no condena otras formas de satisfacer las necesidades nutricionales del niño. Amamantar no es un mandamiento, ni dar el biberón es pecado. De hecho, puede haber muchas razones por las que la alimentación con biberón sea necesaria para una madre y su hijo en particular. Cada madre debe buscar la sabiduría de Dios para determinar la mejor manera de satisfacer las necesidades de su hijo (Santiago 1:5), y los demás deben abstenerse de emitir juicios sobre cuestiones no esenciales (Colosenses 2:16). Sin embargo, cuando ves a una madre amamantando, puedes recordar cómo Dios anhela protegerte y proveerte, y cómo puedes ministrar a aquellos a quienes estás discipulando.

COMPRENDE

REFLEXIONA

PONLO EN PRÁCTICA