Ismael, el primogénito de Abraham con Agar, la sierva de su esposa, nació cuando Sara, la mujer de Abraham, era estéril. Por sugerencia de Sara, Abraham tuvo un hijo con Agar, con la esperanza de cumplir la promesa de Dios de tener descendencia. Sin embargo, surgieron conflictos entre Sara y Agar, por lo que Agar e Ismael fueron expulsados al desierto. Dios prometió bendecir a Ismael y hacer de él una gran nación, lo cual cumplió. Los descendientes de Ismael se nombran en Génesis y desempeñaron roles importantes en los relatos bíblicos. En el Nuevo Testamento, Pablo utiliza a Ismael e Isaac de forma alegórica para ilustrar los temas de la esclavitud y la libertad en el plan de Dios. Ismael es considerado patriarca y profeta en el islam. La historia de Ismael, según la Biblia, revela la necesidad de confiar en la promesa de Dios más que en el esfuerzo humano (Gálatas 4:21-31; Romanos 9:7-9).
En la historia de Ismael vemos la gracia, la misericordia y la paciencia de Dios. Dios cumplió Su promesa de bendecir a los descendientes de Abraham a través de Sara, pero aun así reconoció a Ismael y Agar y también los bendijo. La vida de Ismael demuestra la fidelidad de Dios a Su pueblo. También nos sirve de advertencia cuando sentimos la tentación de “ayudar” a que se cumplan las promesas de Dios. Además, es un recordatorio de la diferencia entre el esfuerzo humano y los milagros de Dios. En Gálatas 4, Pablo utiliza a Agar como un ejemplo metafórico de la esclavitud a la ley y a Sara como un ejemplo de la libertad en Cristo. Nuestra salvación no procede de nuestro propio esfuerzo, sino de la gracia de Dios (Gálatas 4:21-31; Efesios 2:1-10).
Para comprender:
Ismael, el primogénito de Abraham con Agar, nació cuando Sara era estéril, lo que provocó tensiones y la expulsión de Agar.
Dios prometió que Ismael engendraría doce príncipes y se convertiría en una gran nación, a pesar de no ser el hijo del pacto.
Tras burlarse de Isaac, Ismael y Agar fueron enviados lejos, pero Dios proveyó para ellos en el desierto y reafirmó su promesa de hacer de Ismael una gran nación.
Para reflexionar:
¿Cómo manejas las situaciones en las que sientes la tentación de solucionar las cosas por tu cuenta en lugar de confiar en el tiempo y las promesas de Dios?
Reflexiona sobre la provisión de Dios para Agar e Ismael en el desierto. ¿Qué aprendes de Dios? ¿En qué momentos has experimentado la fidelidad de Dios en tiempos difíciles?
¿Cómo ves la provisión de Dios cuando te sientes ignorado o menos importante que los demás?
Para poner en práctica:
Los musulmanes afirman que, como Ismael era el primogénito de Abraham, el pacto de Dios se cumplió a través de Ismael y no de Isaac. También creen que Ismael fue el hijo que Dios le pidió a Abraham que sacrificara, no Isaac.
Aunque Ismael no es el hijo de la promesa de Dios a Abraham, las bendiciones que Dios profetizó sobre Ismael se cumplieron. Sería inexacto decir que Ismael fue el padre de todos los árabes, pero es probable que muchos árabes desciendan de él.
¿Qué implicaciones tiene la historia de Ismael para nuestra comprensión de las promesas de Dios y los intentos humanos de “ayudar” a que se cumplan?